Los amigos de Portal Esquizofrenia han hecho una estupenda primera crítica del nuevo álbum de DREAM THEATER, que recordemos sale a la venta el próximo día 24 de este mes. Tema a tema, detalladamente:
Por Pablo M. Beleña (Portal Esquizofrenia)
Lunes 16 de septiembre 2013
Ya está aquí entre nosotros 'Dream Theater', el 12º álbum de estudio de los reyes del metal progresivo internacional. Un disco homónimo que se ha ofrecido online este lunes 16 de septiembre para escuchar gratuita y temporalmente en streaming. 'Portal Esquizofrenia' ha hecho un esfuerzo por retratar tema a tema el contenido del mismo hasta que todos podáis disfrutarlo el día 24 en vuestras manos, una vez que esté ya a la venta.
1. 'False Awakening Suite'
'Dream Theater' son casi 70 minutos donde el comienzo arranca con una maravillosa suite que se hace corta. Se trata de 'False Awakening Suite', de tan sólo 2'42'' y que de todos modos tiene 3 partes, 'Sleep Paralysis', 'Night Terrors' y 'Lucid Dream'. Épica pieza instrumental donde Jordan Rudess deja claro que es el verdadero dueño de la música actual de Theater, al menos en el sentido formal. Nota: 9
2. 'The Enemy Inside'
Fue el primer single que ofreció la banda y por tanto es conocido por todos, así que no nos detendremos mucho más. Sólo añadir que en el contexto del disco y tras la increíble intro del álbum, gana mucho y parece más compacta, más adecuada y suena genial. Nota: 8
3. 'The Looking Glass'
Suena una barbaridad a la época 'Awake' e incluso a 'Images and Words', debido a unas guitarras noventeras de John Petrucci que son las protagonistas del tema. Además, James LaBrie suena como en aquella época temprana del grupo, y la producción intenta reflejar esos comienzos. Es un medio tiempo con muchos acordes que intentan recordar a 'Images and Words' y Mike Mangini imita los cambios bruscos de timbales que hizo famosos Mike Portnoy gracias a esos primeros discos de Dream Theater. De todos modos, el tema parece un poco ingenuo, hasta en la forma de cerrar la canción, y no deja la impronta de los DT más maduros, salvo por un solo de Petrucci bastante bueno, bluesy, en el centro del tema. John Myung suena también mucho como en los inicios, golpeando las cuerdas haciendo tapping. Nota: 7
4. 'Enigma Machine'
Llega el tema instrumental más llamativo, ya que dura algo más de 6 minutos. Vuelve a recordarnos sus inicios, incluso a la etapa de Majesty. Llama más que nunca la atención por cómo se ha producido el disco, con sonido noventero e incluso ochentero tardío, como si tuviera overdubs en la batería, ya que suena hueca y muy rimbombante, al estilo de esos tiempos. Hacia la mitad del corte sorprende la calidad instrumental de Petrucci, Myung y Rudess, con Mangini haciendo buen acompañamiento. Por momentos suenan muy a lo 'Scenes From a Memory' y otras, sobre todo cuando Petrucci introduce un solo muy bluesy, suena a 'The Count of Tuscany' y 'The Best of Times'. Buen tema en definitiva, pero le falta algo de carisma para llegar, como hacían DT en otros tiempos. Nota: 8
5. 'The Bigger Picture'
Increíble comienzo de este medio tiempo melódico, tierno y muy cálido donde reencontramos a James LaBrie tras el parón instrumental del anterior tema. La calidez la logran primero con el piano maravilloso de Rudess y, posteriormente, con unos teclados atmosféricos soberbios del artista con perilla. Sorprende luego cómo está trazado el tema, a veces con bases rítmicas pregrabadas, supercomercial en los guitarreos, sobre todo pasado el minuto quinto, donde DT acaban de manera prodigiosa, con una magia que hacía tiempo no les oíamos... Sobresaliente se queda corto. Ojo que el tema decepcionará mucho a los más metaleros y a los que aman la vena más brutal del grupo, ya que se nota que sin Portnoy no hay más 'Trenes del pensamiento' como en 'Train of Thought', sino más bien melodías, medios tiempos y sinfonismo, de las manos de Rudess y LaBrie, que parece que han domado a la bestia Petrucci para hacer algo más comercial y para todos los públicos, a veces recordándonos al cuestionado 'Falling Into Infinity'. Ojo al tema también de la originalidad, porque el cierre parece un autoplagio de la gran suite de 40 minutos del 'Six Degrees...'. Nota: 9
6. 'Behind the Veil'
Otra vez nos sorprenden con una sonoridad que parece sacada de sus antepasados o de incluso otras bandas con esas texturas sonoras, como por ejemplo los alemanes Sylvan. Sin embargo, a los 2 minutos nos sorprenden con un oscuro pasaje, casi satánico, aunque pronto cambiado por la recuperación de atmósferas más melódicas, suaves, y de nuevo LaBrie cantando en limpio. Son inevitables algunas comparaciones, y aquí nos recuerdan un poco a las canciones de los pasajes sobre el alcoholismo que componía Portnoy. El solo central de Petrucci suena tan a sus inicios que parece que en cualquier momento va a clavar el solo de 'Another Day'. De todos modos, no es un tema muy bien pensado, y suena algo distante y poco contundente, poco expresivo. Nota: 7
7. 'Surrender to Reason'
Sin duda el tema más flojo hasta el momento del álbum. Extraño tema que no es ni un tema duro, ni un medio tiempo ni una balada ni nada, realmente. Sin mucha melodía, juega con las desarmonías y los ejercicios instrumentales de Myung, Petrucci y Rudess. En los estribillos la banda mejora un poco la cosa con líneas épicas que convencen algo más, dejándonos una canción entre triste, melancólica y profunda, donde las letras han corrido a cargo de Myung. Nota: 7
8. 'Along for the Ride'
El segundo tema que ya conocíamos gracias al single que hace poco sacaron como adelanto y promoción del disco. Como sabéis, es un medio tiempo preciosita, cálido y muy ñoño, donde no se le puede achacar gran cosa, salvo que no termina de llegar como los temas del pasado. Además, hay momentos en los que suena a cosas ya compuestas en sus anteriores trabajos. En todo caso, es un buen corte donde LaBrie es el gran protagonista porque la línea vocal está por encima del resto de la banda y si acaso brilla Rudess con pomposo teclado de fantasía en el solo central. Nota: 7,5
9. 'Illumination Theory'
Y así llegamos al momento cumbre, la suite final, recordándonos a las estructuras de discos de otros tiempo, donde dejaban para el final este tipo de composiciones. 22 minutos, casi nada, donde el grupo arranca su vena épica casi del Señor de los anillos para introducirnos en mundos de fantasía y belleza formal única. Eso se logra al comienzo con la intro 'Paradoxe de la Lumière Noire'. Pronto arranca el doble bombo para ir con también de la mano de Petrucci y Myung y sus cuerdas oscuras en 'Live, Die, Kill', donde cada vez se nota más a qué mundo y a qué terrenos nos quieren meter dentro de sus fantasías: guerras y peligros al trote entre los enemigos. No son sus mejores composiciones de este estilo, todo hay que decirlo. Sin conocer bien el paso a cada parte de la suite, arranca la línea vocal rompiendo hasta lo ahora puramente instrumental, con LaBrie cantando agresivo y rápido en lo que parece ser 'The Embracing Circle'. Oscuro pasaje, poco melódico, donde de nuevo los elementos esenciales son Myung y Petrucci, sonando en tonalidades muy graves, con Mangini reforzando esos aires. Rudess parece más oculto aunque tras las partes cantadas hace de puente.
En busca de la verdad, en lo que parece ser ahora 'The Pursuit of Truth', mejoran lo oído hasta el momento en esta prometedora suite. Tras la furia, la calma, y DT nos adentran en un bosque místico con unas capas mágicas creadas en la mente de Rudess, al más puro estilo Rick Wakeman en los mejores y más oníricos momentos de Yes. La parte puramente de música clásica, imitando a una sección de cuerda completa de una orquesta sinfónica es tremenda. Quizás no pega con el resto de la suite, pero es exquisita y propia de una banda sonora de película de primera línea, de superproducción hollywodiense, vaya. Y cuando la paz era nuestra, tema de heavy clásico ochentero, sonando a Europe y otras bandas que estaban entre el rock duro y el hair y glam. Curioso cambio de rumbo para oír a LaBrie desgañitándose como en 'Images and Words', cuando intentaba llegar a las notas que no eran de su alcance sin exagerar su apertura de las cuerdas vocales. Esa agresividad musical supone un contraste brusco con lo justo anteriormente escuchado y aunque suena original, tampoco es de lo mejorcito de la banda. Lo mejora Petrucci con un solo increíble sobre el minuto '13 del tema, ahora sí rememorándonos los mejores tiempos del virtuoso guitarrista. Rudess le dobla con su teclado-guitarra, también dejando un metal con aroma clásico de los '80.
Ya por último entramos en la última parte, el cierre: 'Surrender, Trust & Passion', si es que los solos de Petrucci y Rudess no pertenecen a ésta. En todo caso, Rudess nos mete de nuevo en un onírico pasaje también de sabor épico donde la banda, ahora sí, nos deja lo mejorcito que tiene en sus mentes y manos. Mangini se pone 'pornoysta' y suenan esos coros celestiales de los teclados de Jordan que nos llevan a otro planeta, logrando mejorar por momentos 'Octavarium' o 'Six Degrees' (el final es muy similar), o incluso 'A Change of Seasons'. Tiene fuerza, tiene épica, tiene carisma, tiene sentimiento, tiene magia... lo tiene todo. Ojo a la sorpresa final, cuando el tema parece haber acabado y llevamos varios segundos en silencio...
En definitiva, un broche de oro a un tema al que se le podría achacar durar demasiado, porque no todas las partes son brillantes. Perfectamente podría haber sido de 15 minutos. Pero lo dicho: el final lo hace olvidar todo y sube la nota global del disco.
Nota: 8,5
Nota: 8,5
Os dejamos con el segundo tema que la banda adelantó, 'Along For The Ride':
Y recordad 'The Enemy Inside':
Y el listado de temas del disco homónimo 'Dream Theater':
01. False Awakening Suite
I. Sleep Paralysis
II. Night Terrors
III. Lucid Dream
02. The Enemy Inside
03. The Looking Glass
04. Enigma Machine
05. The Bigger Picture
06. Behind The Veil
07. Surrender To Reason
08. Along For The Ride
09. Illumination Theory
I. Paradoxe de la Lumière Noire
II. Live, Die, Kill
III. The Embracing Circle
IV. The Pursuit of Truth
V. Surrender, Trust & Passion
Web oficial de Dream Theater:
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